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La cola de caballo le produjo un escalofrío al rozar su espalda y recordó el
placer de los dedos de Luke sobre su melena, la leve presión en su nuca& Tenía que
controlarse si no quería perder la cabeza. Luke forcejeaba con la cerradura de la
puerta principal, hecha de madera de roble. Antes de seguir a Luke dentro de la casa,
Cat se agachó para arrancar una semilla que se había abierto paso entre las planchas
de madera del porche.
 ¿Vas a plantar esa semilla en una maceta?  preguntó Luke mientras
señalaba el trofeo de Cat, que había arrastrado una porción de tierra húmeda.
La sonrisa de Luke se enredó en el corazón de Cat. El sol incidió directamente
sobre su tez morena y magnificó la sombra de su mentón, todavía sin afeitar. Su larga
figura, recortada a contraluz, resultaba apabullante. Estaba radiante vestido con unos
vaqueros casi blanquecinos después de tantos lavados y una cazadora de cuero.
Estaba demasiado guapo y resultaba demasiado atractivo para una sencilla chica de
Oregón. Y, sin embargo, lo deseaba más que al aire que respiraba. Levantó en el aire
la semilla algo mustia.
 ¿Tienes una maceta?
 Y una ventana  contestó serio . Vamos, dame eso. Te enseñaré la casa por
tan solo veinte dólares.
Luke tiró la semilla por la ventana y se limpió las manos.
 ¿Veinte dólares?
 Y te aseguro que valdrá la pena  añadió Luke . Mira bien por dónde pisas.
Puede que haya alguna madera suelta todavía.
El vestíbulo cuadrado resonó con el eco de sus pisadas. Cat siguió a Luke hasta
una amplia habitación repleta de caballetes, botes de pintura, virutas de madera y
otros utensilios similares. El sol bañaba la habitación a través del plástico que cubría
los vanos de las ventanas. La estancia olía a madera fresca, barro cocido y polvo. Cat
esquivó un montón de clavos para atravesar la habitación.
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Cherry Adair  Lecciones de seducción
 ¡Vaya! Esta chimenea tiene una pinta estupenda  apreció Cat y pasó la mano
sobre las piedras antes de mirar a Luke de reojo . ¿Has traído a mano cada una de
estas moles de piedra?
Luke le dedicó una mirada de espanto ante la idea. Se quitó la cazadora y la
dejó sobre una escalera de mano.
 ¿Estás bromeando?  respondió . ¿Para qué crees que tengo a Nick? El
pobre necesitaba hacer un poco de ejercicio.
 Eres incorregible  Cat meneó la cabeza . ¿Cuál era la apuesta?
 Se trataba de comerse galletas saladas  dijo y sacó pecho con orgullo hasta
que sus pectorales se marcaron contra la camiseta . Yo me comí veintitrés.
 Eres un bruto  dijo Cat casi sin resuello ante la visión de su cuerpo .
Seguro que te pasaste una semana en la cama.
 Bueno, sí  admitió . Pero reconozco que valió la pena.
Su sonrisa era contagiosa y el corazón de Cat brincó dentro de su pecho en el
instante en que Luke la rodeó con su brazo y se quedó de pie, junto a ella, mirando
con orgullo la chimenea.
 Hicieron falta casi un centenar de piedras sacadas del campo para levantar
esta pequeña chimenea  apuntó Luke.
Llegaba hasta el techo y tenía casi dos metros de anchura. Difícilmente podía
calificarse como una chimenea pequeña. Cat sacudió la cabeza con resignación. Ya
estaba acostumbrada a las ridículas apuestas de Luke y Nick.
 ¿Cuándo vais a dejar de comportaros como unos chiquillos? Que yo sepa,
lleváis haciendo apuestas estúpidas desde el colegio.
 Hicimos una apuesta en firme para ver quién lo dejaba primero  dijo Luke.
Cat se deslizó de modo casual fuera de su abrazo. Sintió un cosquilleo en la
nuca y una flojera en las rodillas mientras avanzaba hacia el plástico que cubría el
ventanal que daba a la bahía.
 Luke, esta vista es increíble  afirmó . Absolutamente gloriosa. ¿Crees que
habrá algún ciervo por ahí fuera?
 Vi una hembra con su cría la semana pasada  aseguró Luke.
Luke se alejó y se apoyó contra una columna maciza. Se quedó ahí con los
brazos cruzados y miraba a Cat con los ojos entornados. Ella pensó que resultaba
muy apropiado que alguien tan robusto como él se apoyara en un pilar macizo de la
casa. Algo incómoda bajo su atenta mirada, se giró sin mirarlo.
 ¿Te encuentras bien?
 Por supuesto  respondió con alegría . ¿Por qué no iba a estar bien?
 Pareces& un poco& diferente.
 ¿Diferente? ¿A qué te refieres?  preguntó Cat.
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